El aceite forma una capa lubricante entre las piezas del motor, reduciendo su desgaste y garantizando un buen mantenimiento del vehículo, ayuda a mantener limpio el motor porque arrastra las impurezas y favorece el enfriamiento del motor, ya que lubrica anillos, pistones, cilindros, cigüeñal, etc., conservando una temperatura de operación óptima.
Es aconsejable realizar un control periódico sobre su nivel y realizar el cambio de aceite siguiendo las recomendaciones del fabricante.
En los aceites minerales, no es aconsejable superar los 5.000 km, en el caso de los semisintéticos 10.000 km y los sintéticos pueden alcanzar los 15.000 km de vida útil.
En nuestras sucursales contamos con la más alta tecnología para llevar a cabo este procedimiento asegurando un trabajo de óptimas condiciones.
Siéntete tranquilo, ¡estás en manos de los expertos!